Existen numerosos errores que pueden cometerse durante el proceso de higiene dental, una de las acciones más importantes del día. Muchas veces, se realizan sin tener constancia de cómo se deberían cepillar los dientes de forma correcta. En otros casos, por la falta de tiempo para dedicarle a este momento. 

A lo largo del artículo se recogen los cinco hábitos incorrectos más comunes del cepillado y cómo se deberían llevar a cabo:

APLICAR DEMASIADA FUERZA EN EL CEPILLADO

Un exceso de fuerza puede generar el efecto contrario al deseado, en vez de una limpieza profunda se dañará el esmalte dental y las encías. Es preferible un cepillado suave, prestando atención a cada pieza dental y evitando irritar el tejido que conforma las encías.

UTILIZAR UN CEPILLO DE DIENTES DESGASTADO O INCORRECTO

Con el comienzo de cada estación, se debería reemplazar el cepillo dental o cabezal empleado. Un correcto estado de las cerdas, permitirá un perfecto arrastre e higiene. Un truco para recordarlo es anotar en tu calendario cuándo se debe sustiuir.

Por otro lado, seleccionar un buen cepillo es otra de las claves. Existen multitud de variedades, pero se debería elegir siempre un cepillo de cerdas suaves si tus encías son sensibles o uno de cerdas medias si no presentas inflamaciones o sangrado. Se debería evitar una dureza alta, puesto que a largo plazo sí pueden generar irritaciones.

CEPILLARSE DE FORMA INCORRECTA 

Normalmente se tiende a realizar movimientos de frotado de un lado a otro de la dentición. Realizando este movimiento genérico, se corre el riesgo de mantener partes sin higienizar (sobre todo las traseras). En cambio, si se realizan movimientos circulares empezando desde las encías hasta la dentición, el éxito estará asegurado. 

Recuerda, también, que no se debería humedecer el cepillo nunca. Se aplicará la pasta dentífrica sobre las cerdas y a continuación se iniciará la acción. Cualquier producto dental mezclado con agua puede perder parte de sus propiedades activas y generar una excesiva espuma. 

EMPLEAR MENOS TIEMPO DEL DEBIDO

El tiempo mínimo debería ser de dos minutos, repitiendo el proceso por dos veces o tres al día. Menos tiempo generaría una acumulación prolongada de restos, pudiendo dañar la salud bucodental al formarse la placa.

EL MOMENTO DEL CEPILLADO DENTAL ES CLAVE

Recordar cuándo debemos realizar el cepillado es importante, pues no siempre es aconsejable realizarlo de forma inmediata o evitarlo. Por ejemplo, de noche muchas personas suelen descuidar este acto sin saber que las bacterias generadas junto a los restos acumulados podrían aumentar el riesgo de padecer caries en un corto plazo de tiempo. Otro caso sucede después de tomar alimentos de contenido ácido, como los cítricos; se deberá esperar más de 20 minutos para que la saliva ejerza su labor neutralizadora y no se provoque una degradación del esmalte.

¿SUELES REALIZAR CORRECTAMENTE EL CEPILLADO DENTAL?

Si todavía no es así, debes saber que siempre estás a tiempo de introducir pequeños cambios en la rutina diaria que aseguren el éxito de tu higiene bucal. En caso de tener dudas, te aconsejamos acudir a una revisión para comprobar el estado de salud oral y que el propio profesional te explique de forma más personalizada. 

Recuerda que puedes contar con nuestra clínica para ayudarte, somos expertos en Odontología desde hace más de 20 años. ¡Llámanos y te atenderemos encantados!

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